LOS FILTROS Ventajas y Desventajas

Por Javier Peña

Para muchos aficionados de cielo profundo la sutileza de ver un objeto con mayor o menor contraste pasa desapercibida. No así para aquellos que desaena saborear.

Ciertos objetos de cielo profundo emiten una parte significativa de su luz en determinadas bandas estrechas de las longitudes de onda roja, azul y verde. Las nebulosas de emisión, por ejemplo, emiten prácticamente en las longitudes de onda del hidrógeno beta (H -b a 4861 angstroms), del oxigeno III (0-III entre 4959 y 5007 angstroms) y el hidrógeno alfa (H-a a 6563 angstroms).

Mientras que las lámparas incandescentes corrientes emiten un espectro continuo, en el rango visual y el infrarrojo cercano, algunas de las nuevas iluminaciones
artificiales brillan en un determinado rango espectral, distinto del que emiten las nebulosas. Las lámparas más populares hoy en día son las de vapor de sodio de alta presión.

La luz de éstas brillan en una banda espectral ancha, aun así los máximos o picos se sitúan en la región de los 5500 a 6300 A. Las lámpara de vapor de mercurio, utilizadas normalmente para la iluminación de seguridad, brilla en los 4050, 4360 y en la región comprendida entre los 5400 y 6300 A. Por último, las lámparas de vapor de sodio de baja presión emiten su luz en una estrecha zona espectral situada en los 5900 A.

En teoría, la polución lumínica puede ser drásticamente reducida si impedimos el paso de las longitudes de onda perjudiciales (que vienen de las lámparas) pero dejamos pasar las ondas beneficiosas provenientes de los objetos celestes. Las longitudes de onda emitidas por las lámparas de sodio de baja presión son especialmente fáciles de bloquear con un filtro.

La mayoría de los filtros bloquean la región espectral donde se sitúa la luz proveniente de la mayoría de la contaminación lumínica, la cual se sitúa en el espectro visible entre los 5500 y 6500 A. Esto hace que tanto el fondo del cielo como el objeto se oscurezcan. Sin embargo, muchos objetos tiene su máximo brillo en una región determinada de la longitud de onda cercana al lugar donde el filtro bloquea. El efecto visual neto aumenta el contraste entre el objeto y el cielo de fondo oscurecido por el filtro. El resultado es una mejor visión del objeto.

TIPOS DE FILTROS

Los filtros nebulares pueden ser de tres tipos: de "banda ancha" (BA), de `banda estrecha" (BE) y filtros de línea (FL). Los filtros BA dejan pasar una amplia banda del espectro visible, generalmente la comprendida entre las longitudes de onda de 4.300 y 5.500 A. Los filtros de BE dejan pasar las longitudes de onda comprendidas en tre los 4.800 y 5.200 A. Por último, los filtros de línea (FL) sólo permiten el paso de una pequeñísima banda de transmisión, admitiendo tan solo una o dos líneas de emisión. Dependiendo de la naturaleza del objeto a observar un filtro determinado puede dar mayor contraste permitiendo una mejor observación del objeto. Pero también puede ser inútil, ya que un único filtro no siempre es el mejor para cualquier observación.

Evidentemente los resultados que dan estos filtros varían en función al lugar en que nos encontremos. No es lo mismo por ejemplo estar en una zona situada a las afueras (le una ciudad, donde las estrellas niás brillantes visibles a simple vista son de la 5A magnitud, que estar en una ciudad fuertemente iluminada, donde la magnitud límite a simple vista se reduce a la 3", o situarse en una zona lejos de la ciudad y sin contaminación lumínica.

También hay que tener en cuenta que la observación con filtros dará distintos resultados según sea el objeto a quien estemos prestando atención. Para comprobsarlo daremos un repaso a como se ven con filtro los disntintos objetos de cielo profundo (galaxias, nebulosas, cúmulos) y como no, los planetas.

FILTROS DE BANDA ANCHA (BA)

Estos están preparados más a combatir la contaminación lumínica que a realzar las nebulosas, debido a que bloquea un rango de longitudes de onda visuales. Los filtros de BA no parecen ser particularmente buenos para la observación de estrellas. Usado con cúmulos, los filtros hacen perder una magnitud estelar completa, haciendo que alguna de las más débiles estrellas se desvanezcan de la vista.

En cuanto al brillo se refiere, algunos objetos Messier como las galaxias M81 y M82 en UMa, la más débil M51 en CVn, o la más difusa espiral MI 01 se condensarán por el oscurecimiento del cielo de fondo, pero este oscurecimiento también afectará a las zonas más difusas de la galaxia, por lo que se perderá gran parte de ésta. Olvidate de ver galaxias situadas en el umbral de visibilidad utilizando este tipo de filtros, tus intentos se verán frustrados.

Otra cosa es la observación de galaxias muy difumonadas como la galaxia M 101 en UMa, notoria por su bajo brillo superficial (14.7). El Lumicon DeepSky dará un significante progreso en la definición y tamaño aparente de la galaxia. Lo mismo sucederá con otras galaxias de bajo brillo superficial, como M33 y M 109. El resultado será una ganancia neta en la visibilidad de estos objetos.

Los filtros de BA trabajan decentemente con las nebulosas. Sin filtro, podremos ver M78 en Orión desde las afueras de Gandía, pero sólo como una manchita de brillo difuso rodeando a un par de estrellas. Con filtro la visión mejorará y dará un mayor contraste, ya que mostrará la característica nube cometaria mientras que las estrellas quedarán oscurecidas.

A pesar de que los filtros de BA no están diseñados para la observación planetaria, da buenos resultados, en especial con Marte y Júpiter. Con el planeta rojo el resultado es sutil pero evidente, resaltando las zonas polares. Con Júpiter se incrementa bastante el contrastes de las bandas y zonas.

FILTROS DE BANDA ESTRECHA (BE)

No hay duda de que estos filtros no están diseñados para dejar pasar una ancha banda espectral y por lo tanto son inadecuados para cúmulos de estrellas, galaxias y planetas. El único efecto positivo es el aumento del contraste de ciertas zonas de la superficie
marciana.

Los filtros de BE están destinados más a las nebulosas de emisión, incluidas las planetarias como M57 en Lyra, M42 en Orion, así como La Roseta y La Laguna. Entre los telescopios reflectores y los S/C, las diferencias entre los distintos objetos son muy pequeñas. La mayores diferencias en los resultados es con telescopios refractores.

Este hallazgo resalta el hecho que todos los filtros desempeñan unas características únicas. La longitud de onda óptima de luz que pasa por un filtro de interferencia, su pico de transmisión, desplaza el ángulo incidente de luz hacia una salida de 90°. La banda de transmisión más estrecha del filtro, es el más sensible en el cambio angular. Mientras que esta diferencia es difícil de detectar en un filtro de banda ancha, la diferencia angular en el haz convergente entre un telescopio f/5 y un f/8 puede alterarse perceptiblemente en el pico máximo de transmisión en los filtros de banda estrecha.

Aquí hay dos puntos importantes en la observación de nebulosas planetarias cuando se las observa con filtros de BE . Primero, a excepción de algunos objetos típicos, como la nebulosa del Anillo, la Dumbbell y quizá una docena más, la mayoría de las planetarias se muestran como puntos estelares en los telescopios de aficionados. Si disfrutas cazando estas volutas minúsculas de gas, los filtros de banda estrecha pueden usarse para tu ventaja. Para observar alternativamente con y sin un filtro (sosteniendo el filtro entre el ojo y el ocular), una planetaria minúscula parece parpadear cuando se la compara con las estrellas de fondo, haciendo la identificación más fácil.

Este mismo efecto puede también volverse contra nosotros. Una vez encontrada la planetaria, a muchos observadores nos gustaría descubrir su estrella central con grandes aumentos. Por lo tanto, una vez se ha disfrutado de la observación, no tendríamos más remedio que quitar el filtro para poder ver a la progenitora de la nebulosa.

LOS FILTROS DE LÍNEA (FL)

Como el mismo nombre indica, los filtros de línea (FL) permiten el paso de una simple y estrecha banda de luz. El resultado es un gran incremento en el contraste entre el oscuro cielo de fondo y los objetos que emiten en esa misma banda de longitud de onda.

El filtro Lumicon O-III (que permite el paso del Oxigeno III) es el más versátil. El resultado es considerablemente satisfactorio en todas las nebulosas planetarias y de emisión. Resalta mucho tanto la estructura como los más finos detalles de los objetos que se observan. Desde el interior de una ciudad fuertemente contaminada lumínicamente el resultado es que la nebulosa se ve mucho mejor con el filtro del OIIIl que con cualquier otro filtro anteriores. La observación es induso mucho mejor que cuando se observa M42 sin filtro desde un lugar con cielos muy oscuros.

Desde un lugar sin contaminación lumínica, las líneas de emisión aparecen por arte de magia cuando se las observa con el filtro del 0 III. El gran contraste dado por el filtro del O III sobre objetos muy brillantes, hace que en algunas ocasiones éstos sean difíciles de detectar.

¿Qué rendimiento tiene el filtro del O-III en otros tipos de objetos? Este filtro no está preparado para ser usado para un amplio espectro de objetos, tales como cúmulos de estrellas y galaxias. Realmente, algunas de las galaxias mencionadas en el artículo simplemente desaparecen cuando se las observa con el filtro puesto. La observación de Marte y Júpiter no da tampoco ningún resultado. Esto es normal teniendo en cuenta el propósito de este filtro.

En resumen, para telescopios de mediana y gran abertura bajo cielos relativamente oscuros, el filtro del 0-III revela insospechados detalles y objetos difíciles. Para pequeñas abertura, en cambio, esta efectividad está muy limitada, y puede induso ir en detrimento.

El filtro Lumicon H-Beta, que permite el paso de la línea del Hidrógeno-b, es conocido entre los afidonados y descrito como el filtro de "la Nebulosa de la Cabeza de Caballo". Esto implica su limitada utilidad. En realidad, el filtro del H-Beta sirve para observar tan solo unos pocos objetos, siendo los más importantes la Nebulosa de la Cabeza de Caballo en Orión y la Nebulosa California en Perseo.

Utilizando el filtro con un Newtoniano de 114mm y f/4.5, la Nebulosa California, invisible con los demás filtros, aparecerá como un objeto fácilmente distinguible. Incluso observando con prismáticos de 10x70, colocando previamente dos filtros H-Beta en sus oculares, se puede apreciar la nebulosa.

En resumen, este filtro sólo es útil para unos pocos objetos, en detrimento del resto del universo. Los objetos brillantes tales como la Nebulosa de Orión (M42), la Laguna y la Nebulosa Omega disminuyen mucho de brillo y tamaño aparente cuando se las observa a través del filtro, mientras que las débiles y sutiles nubes de la Nebulosa del Velo y de la Roseta se hacen visibles con el filtro.

RESUMEN

¿Debemos comprar un filtro? Si estamos interesado en la observación de todos los objetos de cielo profundo, la respuesta es Sí. ¿Qué filtro hay que comprar? Eso depende de lo que deseemos observar.

Si no" tenemos más remedio que observar desde una ciudad, casi nos vemos en la obligación de utilizar un filtro de banda ancha. Estos filtros incrementan el contraste y hacen la observación más cómoda. De los codiciados es el Orion SkyGlow por ser el más útil, seguido muy de cerca del Lumicon Deep-Sky. Tanto el Meade 908B como el Celestron LPR tienen menos adeptos. Ahora bien, si observas desde una zona suburbana, donde todavía existe contaminación lumínica, el consejo es que no utilices una filtro de banda ancha.

Si lo que te interesa es descubrir los detalles finos de las nebulosas planetarias y de emisión, la mejor opción será un filtro de banda estrecha. El mejor filtro de banda estrecha probado en los reflectores y los S/C es el Orion UltraBlock y el Lumicon UHC, seguido por el DayStar 300 y el Meade 908N. Pero para los telescopios refractores el mejor es sin duda el Meade 908N.

Para aquellos que dispongan de telescopios de mediana o gran abertura, deben considerar seriamente el hacerse con un Lumicon O-Ill. Hay quien prefiere un filtro de banda estrecha a uno de línea, porque estos últimos oscurecen demasiado el cielo y hacen la observación algo más incómoda. Por último, el filtro H-Beta mostrará aspectos sutiles en nebulosas de emisión donde los otros filtros fracasan