NOTICIAS

Máximo de las Gemínidas observado por la A.A.S.

Agrupación Astronómica de la Safor, 14 dic 2001

El viernes 14 de Diciembre, un equipo de observación de meteoros de la AAS integrado por Miguel Guerrero, Fran Calvache, Ximo Egea y José Lull, se desplazó a Marxuquera para seguir la evolución del máximo de la lluvia de estrellas fugaces de las Gemínidas, que tienen la conocida peculiaridad de vincularse al asteroide 3200 Phaeton, posiblemente un cometa inactivo. Las condiciones de observación fueron buenas, con una Male de 6.0, temperatura de 8ºC, 65 % de humedad relativa, Luna nueva, y con el radiante alto sobre el horizonte.

La observación pormenorizada comenzó a las 2’45 TU y finalizó a las 5’35 TU. A partir de las 5’35 TU y hasta las 6’00 TU se procedió a un conteo global de fugaces en tramos de cinco minutos.

Los resultados finales se publicarán en Huygens 35, ya que durante la observación pormenorizada quedaron registradas entre 300 y 400 estrellas fugaces que habrá que analizar cuidadosamente. Se observaron muchos meteoros brillantes. Como descripción general podemos decir que la mayoría fueron lentos, de duración por debajo del segundo y de color blanco.

Los datos definitivos que podemos avanzar son los derivados del conteo que se realizó a partir de las 5’35 TU. La TH de 5’35 a 5’40 fue de 264 estrellas fugaces, de 5’40 a 5’45 de 228, de 5’45 a 5’50 de 180, de 5’50 a 5’55 fue de 204 y, finalmente, de 5’55 a 6’00 TU la TH fue de 168 estrellas fugaces por hora. La tasa horaria media de 5’30 a 6’00 TU fue de 214 meteoros por hora. A partir de ese momento se abandonó la observación a causa de las primeras luces del crepúsculo matutino. A falta de organizar los datos registrados de 2’45 a 5’35 TU, aparentemente la TH se mantuvo en valores similares durante ese intervalo de tiempo.

El máximo de las Gemínidas se había previsto para las 4’00 TU con una THZ cercana a 120 meteoros por hora.

NOTICIA 1

La atmósfera del planeta de HD 209458 es más parecida a la de Venus que a la de Júpiter

28 nov 2001 - El científico español Agustín Sánchez Lavega, uno de los mayores expertos mundiales en atmósferas planetarias, nos ha ofrecido su punto de vista sobre el anuncio de la detección de sodio en el planeta extrasolar de la estrella HD 209458.

Agustín Sánchez Lavega pertenece al Departamento de Física Aplicada I de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales y Telecomunicación (Universidad del País Vasco). Buena parte de su actividad científica la ha dedicado al estudio de las atmósferas planetarias de Júpiter y Saturno.

info.astro: Si en sucesivas observaciones se va completando la detección de otros elementos, a parte del sodio, ¿qué conocimientos podremos obtener a partir de la composición atmosférica de este planeta extrasolar?

Agustín Sánchez-Lavega. La detección de otros elementos, y sobre todo la medida de su abundancia, comparada con la de la estrella, aportaría información sobre la formación de ese planeta y la composición química de la nube protoplanetaria de la que se formó. También nos permitiría constreñir el perfil presión-temperatura en la atmósfera y la presencia o no de nubes (y en tal caso su tipo) en sus capas exteriores.

info.astro: Al orbitar tan cerca de la estrella, ¿cuales podrían ser las principales diferencias en la dinámica atmosférica entre este planeta y la de Júpiter o Saturno?

Agustín Sánchez Lavega: La dinámica atmosférica de este planeta esta regida por la intensa radiación recibida de su estrella, lo que hace que a diferencia de Júpiter y Saturno, la fuente interna de calor no juegue ningún papel en la circulación atmosférica en la atmósfera superior (presiones < 100 bares). El otro factor decisivo es que dada la avanzada edad del planeta y (más o menos como el Sol) y al encontrarse tan cerca de la estrella, se espera que su rotación esté sincronizada a la órbita (período unos 3,5 días). Con estos dos parámetros es de esperar que la dinámica atmosférica difiera sustancialmente de la de Júpiter y Saturno, siendo más parecida a la de Venus. Un cálculo simple sugiere que deben de soplar vientos globales desde el hemisferio caliente (el que siempre apunta hacia la estrella) al "frío" de más de 200 metros por segundo. Finalmente señalar que la naturaleza de las nubes, si se confirma, será totalmente diferente a la de los gigantes solares. Probablemente sean las partículas de derivados del magnesio y silicio, e incluso quizás de hierro, las únicas capaces de condensar a las infernales temperaturas de 1100 grados o más allí reinantes.

info.astro: Estudiar un planeta por su espectro ¿es muy diferente a su trabajo actual sobre atmósferas planetarias? ¿Plantea dedicarse en el futuro al estudio de planetas extrasolares?

Agustín Sánchez Lavega: No tan distinto. Es, de hecho, una práctica corriente en el estudio de los gigantes solares. La diferencia es que en el sistema solar estudiamos "el espectro de reflexión" de la luz solar sobre el planeta, y en el caso de HD 209458 lo que se ha estudiado es el "espectro de transmisión" de la luz de la estrella a través de la atmósfera del planeta (esto en el Sistema Solar sólo se puede hacer para Venus ya que Mercurio carece de una atmósfera sustancial). En el futuro se obtendrán también espectros de reflexión de este y de otros planetas extrasolares.
En nuestro grupo de atmósferas planetarias de la Universidad del País Vasco estamos dando los primeros pasos en el estudio de los planetas extrasolares. Recientemente he abordado una posible clasificación de la dinámica atmosférica de estos objetos que el lector interesado puede encontrar en la revista Astronomy and Astrophysics Vol. 337, 354-360 (2001).

(fuente: infoastro)

NOTICIA 2

Observada por vez primera la composición de una atmósfera exoplanetaria

Atmósferas exoplanetarias

Un equipo de astrónomos estudounidenses han anunciado los resultados de una investigación en la que han conseguido detectar parte de la composición atmosférica de un planeta extrasolar descubierto en 1999.

Observando eclipses de planetas extrasolares

En general, la gran mayoría de planetas extrasolares descubiertos hasta el momento lo han sido gracias a la técnica de velocidad radial, y por el momento, no se ha podido obtener una imagen de ningún planeta extrasolar de forma directa.

La detección de planetas extrasolares mediante su paso (tránsito) por el disco de la estrella que orbitan ha sido utilizada por algunos astrofísicos durante muchos años como método alternativo al de velocidad radial, aunque hasta ahora no se ha mostrado muy efectivo. El problema está en que la órbita de los exoplanetas debe coincidir aproximadamente con nuestra línea de visión para producir un tránsito.

El tránsito sería detectado como una bajada de brillo en la estrella. Pero ¿cómo interpretar un sólo resultado positivo si las estrellas tienen bajadas de brillo debido a manchas estelares, cambio de diámetro, nubes de polvo, etc? Lo que buscan los astrofísicos es la periodicidad en dichos tránsitos.

En 1999 se anunció por vez primera la detección positiva de un tránsito, aunque fue un descubrimiento con truco. Geoffrey Marcy y su equipo había descubierto un nuevo planeta extrasolar cuya órbita parecía coincidir aproximadamente con nuestra línea de visión y cuyo periodo era de unos tres días. El equipo se puso en contacto con Greg Henry para que realizara un seguimiento de la luz que nos llega de HD 209458, quien dedicó uno de sus telescopios en el Observatorio Fairborn (Arizona) a la tarea. Y efectivamente, el día 7 nov 1999, Henry observó un descenso de brillo en la estrella del 1,7%.

Posteriormente, un equipo de astrónomos aficionados pudo observar el tránsito mediante un instrumental bastante modesto.

El planeta de HD 209458

La estrella HD se encuentra en la constelación de Pegaso a 153 años luz del Sistema Solar. Ésta es una estrella similar al Sol, tanto en color, brillo y edad. El candidato a planeta extrasolar posee sólo un 70% masas jovianas, pero su radio es 1,3 veces más grande que Júpiter. De hecho, debe ser muy similar a Júpiter, un gigante gaseoso con un pequeño núcleo de roca. No se espera, por tanto, que exista vida de tipo terrestre en este planeta.

De hecho, no sólo es imposible que hayan habitantes paseando por los inexistentes continentes de este exoplaneta por que no haya superficie en la que pasear. Este planeta describe una órbita cada 3,523 días. El radio de esta órbita es de unos pocos millones de kilómetros (Júpiter tiene un periodo de 13 años y se sitúa a casi 800 millones de kilómetros del Sol, mientras que la Tierra tarda un año y está a sólo 150 millones de km). Debido a la gran cercanía, el planeta debe sufrir una gran insolación que podría situar su temperatura media en unos ¡1100° C! Incluso la superficie de Venus, con sus 400° C y sus lluvias de ácido sulfúrico debe ser un paraíso en comparación con este planeta.

La mayor parte de las características físicas de este planeta extrasolar se han deducido a partir de la gráfica de brillo de los eclipses. Por ejemplo, en un artículo publicado en la revista Astrophysical Journal, Timothy M. Brown, David Charbonneau y otros científicos estadounidenses, haciendo uso de la cámara STIS abordo del Telescopio Espacial Hubble llegaron a la conclusión de que este planeta no posee ningún satélite con más de 1,2 diámetros terrestres y tampoco posee un sistema anillos parecido al de Saturno.

Detectando sodio en atmósferas lejanas

Ahora, este mismo grupo de astrofísicos han informado de la detección de sodio en el planeta de HD 209458. ¿Cómo han detectado este elemento? La tarea es más bien fácil: usando un instrumento del Telescopio Espacial Hubble que descompone la luz que nos llega de esta estrella produciendo una especie de arco iris artificial (llamado espectro). Luego, comparan los espectros obtenidos durante el tránsito del planeta y fuera de él: las diferencias encontradas deben corresponder al planeta. Y precisamente, la mayor diferencia que los astrofísicos observaron en el espectro es debido al sodio presente en la atmósfera planetaria.

Una pequeña sorpresa, aunque no revolucionaria sí interesante, ha sido la detección de menos sodio del esperado para un planeta de tipo joviano. El grupo de investigadores cree que las nubes de gran altura de esta atmósfera alienígena puede haber bloqueado parte de la luz estelar.

En palabras de David Charbonneau, «esto abre una nueva y excitante fase en la exploración de planetas extrasolares, donde podemos empezar a comparar y constrarar las atmósferas de los planetas alrededor de otras estrellas».

(fuente: infoastro)

NOTICIA 3

Qué se esconde bajo una mancha solar

Mediante el uso de técnicas similares a las de diagnóstico médico por ultrasonido, los científicos han echado una mirada dentro del Sol y han descubierto qué es lo que se esconde debajo de las manchas solares, áreas oscuras del tamaño de planetas sobre la superficie de nuestra estrella. Sorprendentemente, las manchas solares son poco profundas, dicen los investigadores, y yacen sobre huracanes arremolinados de gas electrificado, lo suficientemente grandes como para engullirse al planeta Tierra.

El nuevo trabajo de investigación, desarrollado a partir del "Graficador Michelson de Efecto Doppler" (Michelson Doppler Imager MDI, en inglés) a bordo del Observatorio Solar y Heliosférico -- Solar and Heliospheric Observatory -- (SOHO), tendrá como resultado profundizar nuestro conocimiento sobre las tormentosas áreas del Sol -- llamadas "regiones activas" -- donde aparecen las manchas solares. Poderosas explosiones en regiones magnéticamente activas pueden desencadenar hermosas auroras sobre la Tierra y afectar a sistemas de alta tecnología, como los satélites, las redes de suministro de electricidad y los sistemas de radiocomunicaciones.

Las manchas solares han fascinado a los seres humanos desde los comienzos del siglo diecisiete cuando las observaciones realizadas por Galileo contradijeron la creencia popular de que los objetos celestiales eran perfectos. Las manchas solares han permanecido como un misterio por casi 400 años. A primera vista, pareciera que las manchas solares deberían desaparecer rápidamente. Sin embargo, permanecen por semanas o aún por más tiempo.

"Ellas [las manchas solares] obedecen a lo que es una conclusión fundamental en las ciencias basadas en la observación: cualquier cosa que ocurre, puede ocurrir", dice Philip Scherrer de la Universidad de Stanford (Stanford University), investigador principal a cargo de  la MDI  a bordo de SOHO. "Ahora tenemos una pista de cómo [esto sucede]".

Por mucho tiempo, los astrónomos han sabido que las manchas solares son regiones en donde se concentran los campos magnéticos. Más aún, cualquiera que haya jugado con imanes siendo un niño, ha experimentado como los campos magnéticos de la misma polaridad se repelen entre sí. De la misma manera, los fuertes campos magnéticos de las manchas solares deberían rechazarse naturalmente, provocando la rápida disipación de las manchas. De hecho, las observaciones muestran que el material de superfice claramente fluye desde las manchas hacia afuera.

¿Entonces, qué es lo que hace que las manchas solares sean tan persistentes? ¿Cómo es que permanecen intactas por semanas y meses? Un equipo de científicos tuvo que mirar debajo de la superfice del Sol para encontrar la respuesta.

Alexander Kosovichev y Junwei Zhao de la Universidad de Stanford, junto con Thomas Duvall del Centro para Vuelos Espaciales Goddard (Goddard Space Flight Center) de la NASA, utilizaron las herramientas únicas de MDI para investigar lo que ocurre justo debajo de una mancha solar -- y, por primera vez, observaron claramente material fluyendo hacia dentro de la misma.

"Descubrimos que el material que fluye hacia afuera era sólo una característica de la superficie", dice Zhao. "Si usted pudiera echar una mirada a mayor profundidad, encontraría material precipitándose hacia adentro, como un huracán o remolino del tamaño de un planeta".

(Fuente: infoastro)

Cómo ser astrónomo

Por Inés Rodríguez Hidalgo - La autora, científica del IAC y profesora de la Universidad de La Laguna (Tenerife, Islas Canarias) nos introduce en los pormenores de la carrera universitaria de astrofísica.

La carrera de Astrofísica en la ULL

Desde 1993 la Facultad de Física (junto con la de Matemáticas) de la Universidad de La Laguna está en el Campus de Anchieta, en ese edificio blanco y anguloso, con un reloj grande y un par de cúpulas arriba, en la calle llamada Astrofísico Francisco Sánchez, en honor del fundador y Director del Instituto de Astrofísica de Canarias. Antes de 1995 para obtener la Licenciatura en Física había que hacer un primer ciclo de 3 cursos de formación básica común y un segundo ciclo de 2 cursos de especialidad.

El Nuevo Plan de Estudios del 95 introdujo los créditos: un crédito equivale generalmente a 10 horas de clase y una asignatura semestral típica tiene 6 créditos. Para ser Licenciado en Física ahora hay que conseguir 300 créditos. De ellos, 84 se obtienen cursando asignaturas optativas ofrecidas por los distintos departamentos. Ya no hay especialidades como tales, sino orientaciones, que se consiguen si, de los de los 84 créditos optativos, 48 corresponden a asignaturas de esa orientación. Actualmente se ofrecen 3: Física Aplicada, Física Fundamental y Astrofísica

El Departamento de Física se creó en 1967 y el de Astrofísica en el 74. En los 3 años siguientes el Plan Trienal de Formación de Personal Investigador en Astrofísica formó un número suficiente de doctores para comenzar a impartir la Licenciatura de Física, que comenzó en el curso 78-79, precisamente con el segundo ciclo en la especialidad de Astrofísica. Cuatro años más tarde se empezó a impartir también el primero. La orientación de Astrofísica, nacida al calor del IAC, está fuertemente arraigada en esta Universidad, ya que fue el embrión de las enseñanzas de Física en La Laguna.

Actualmente, el Departamento de Astrofísica, al que yo pertenezco, lo formamos 21 profesores. También imparten clase algunos investigadores del IAC. Nuestra oferta docente consiste en 19 asignaturas optativas, que cubren prácticamente todos los temas de la Astrofísica, para los cursos 2º, 3º y 4º de Físicas, 5 asignaturas para la Licenciatura de Matemáticas, y un programa de doctorado en Astrofísica, que constituye los estudios de 3er ciclo, con 19 cursos especializados.

Materias de estudio para el futuro astrónomo

Sepamos qué estudia realmente un alumno que pretende ser astrofísico, con una selección de algunas de las optativas que debe cursar. Ya en 2º puede elegir la Física del Cosmos, una asignatura de introducción que proporciona una base adecuada para quienes desean seguir la orientación de Astrofísica y, para los que no, una buena visión global de esta disciplina. En 3º y 4º la oferta es mucho más amplia: hay asignaturas básicas, como la Astronomía Clásica que trata de los sistemas de coordenadas para determinar las posiciones de las estrellas, el Sol y los planetas; o la Instrumentación Astrofísica, que enseña los principios básicos de los instrumentos astronómicos.

Otras asignaturas tratan del Sol, las estrellas, el medio interestelar, la Vía Láctea y las otras galaxias o el Cosmos como un todo; por ejemplo, la Física Estelar estudia la estructura y evolución de las estrellas y cómo la radiación es transportada a través de sus capas exteriores, interaccionando con la materia; la Cosmología presenta los modelos más actuales del origen y destino del Universo y la evidencia observacional más reciente que debe ser explicada por tales modelos. Hay también materias más teóricas, con nombres que suenan raros, como Fenómenos de transporte y procesos radiativos, Mecánica de fluidos, Física del plasma o Relatividad General. No podían faltar, por supuesto, asignaturas más prácticas, como los Métodos informáticos y de cálculo en Astrofísica y las tres dedicadas a conocer y utilizar las técnicas más importantes de observación y análisis de los datos astronómicos.

Se trata, en definitiva, de entrenar a los estudiantes de Astrofísica para que puedan enfrentarse al fascinante reto de descifrar el mensaje de la luz y aproximarse así a un conocimiento racional del Universo.

(Fuente: infoastro)

NOTICIA 5

Ahora dudan sobre si hubo vida en Marte

Resultados de un nuevo estudio de la Universidad de Arizona


La Agencia Espacial Norteamericana NASA, sumida en un periodo de incertidumbre tras su reciente cambio de director, no está recibiendo buenas noticias últimamente. A las críticas de un comité de expertos por su derroche en la Estación Espacial Internacional (ISS), se une ahora los datos de un nuevo estudio que pone en duda una de las mayores esperanzas de los científicos: la existencia de vida en Marte.

El meteorito marciano conocido como ALH-84001, caído en la Antártida en 1984, parecía ser hasta ahora una de las pruebas directas de que han existido rastros de vida en el planeta rojo. Sin embargo, un equipo científico de la Universidad de Arizona, en los Estados Unidos, determinó que no habría vida en Marte, luego de realizar un nuevo estudio a la roca de 4.500 millones de años.

El reciente trabajo se publicó el martes en la revista Proceedings de la Academia Nacional de Ciencias. En su reporte, los investigadores afirman que los resultados anteriores se fundaban en un razonamiento equivocado y en mediciones problemáticas.

Las imágenes obtenidas por un microscópico electrónico revelaron líneas de objetos brillantes que se consideraron cristales de óxido magnético (Fe4 O4), células bacterianas en diferentes etapas de mineralización, según el nuevo estudio que contradice las conclusiones precedentes.

"Aun si las similitudes son intrigantes, creemos que no prueban que esos cristales son magnetofósiles o que constituyen una prueba de vida más antigua jamás descubierta"; escriben retomando los términos del estudio precedente los ocho investigadores conducidos por Peter Buseck, de la Universidad de Arizona en la ciudad de Tampa.

El meteorito ALH-84001, el protagonista de la historia

En 1996, el investigador David Mckay de la NASA afirmó haber identificado, en el centro del meteorito ALH-84001, a fósiles de organismos microscópicos que constituían "una prueba de la existencia de una forma de vida primitiva a comienzos de la historia de Marte".

Esta roca fue arrancada de la superficie del planeta hace unos 16 millones de años antes de finalizar su periplo hace 13.000 años en la Antártida, donde fue descubierta en 1984. En 1996, una ola de excitación se generó en la comunidad científica y en el público. Por supuesto, que esta ola fue seguida de una lluvia de controversia.

Sólo una línea de evidencia de vida bacteriana en el meteorito aún permanece: los cristales microscópicos del mineral llamado magnetita.

De acuerdo con los científicos de la NASA, estos cristales de magnetita encontrados en el meteorito son tan estructuralmente perfectos, tan puros en su composición química y tienen tanta singularidad en sus figuras tridimensionales que sólo una bacteria podría haberlos producido (y no algún proceso inorgánico). Esta afirmación es ahora desafiada por el estudio de los investigadores de la Universidad de Arizona.

El geólogo Peter Buseck, uno de los coautores del informe, sostiene que la vinculación entre los cristales del meteorito y la bacteria que habían hecho sus colegas de la NASA es ambigua. Y agrega que los datos usados en el análisis del meteorito están equivocados. Señaló qu en 1996 no se contaba con un tipo de microscopio que permite observar las magnetitas y sus formas, como el que ahora los de la Universidad de Arizona utilizaron.

Mars Odyssey, la base del programa marciano

La NASA, tras sus dos últimos fracasos en el planeta rojo, ha invertido 305 millones de dólares en enviar en busca de agua a la sonda Mars Odyssey, de cuyo éxito dependerá el futuro del ambicioso programa científico diseñado para explorar Marte.

El planeta marciano esconde en su agreste superficie helada las claves que explican su radical cambio climático, que transformó un espacio cálido y húmedo, muy similar a la Tierra, en un lugar inhabitable.

(Fuente: Centro espacial)

NOTICIA 6

China llevaría un hombre a la Luna

Antes del 2005
China planea enviar su primera nave tripulada al espacio antes del 2005 y también está haciendo preparativos para llevar a cabo trabajos de exploración lunar, según afirmó Luan Enjie, director del Departamento Estatal Aeroespacial.

Por ahora, las actividades de China en el espacio se han limitado al lanzamiento en 1999 y 2001 de los vehículos espaciales no tripulados "Shenzhou" ("Tierra Divina"), aunque Beijing ha expresado en numerosas ocasiones que pretende crear una industria espacial y ganar prestigio uniéndose a Estados Unidos y Rusia como las únicas naciones en haber enviado seres humanos al espacio.

Liang Sili, científico de la Academia China de Ciencias, señaló que antes de que se materialice el primer viaje de un astronauta chino al cosmos es necesario un largo trabajo de investigación y pruebas para garantizar completamente la seguridad de los tripulantes.

Según se informó recientemente en la prensa del país, China estuvo a punto de lanzar un vuelo tripulado por seres humanos a la Luna en 1999, coincidiendo con el 50º Aniversario de la fundación de la República Popular China, pero problemas técnicos de última hora e imprevistos obligaron a retrasar el proyecto.

En enero de este año, China envió al espacio la nave "Shenzhou II" con un mono, un perro, un conejo, caracoles, bacterias e insectos que aterrizaron en la base espacial de la que partieron, tras dar varias vueltas alrededor de la Tierra.

Objetivos futuros del programa chino

El diario estatal China Daily informó que Beijing prepara para el 2002 el lanzamiento de tres nuevos satélites para la observación meteorológica, el estudio oceánico y la exploración de los recursos terrestres como parte de su programa espacial 2001-2005.

China mantiene y quiere reforzar la cooperación en el terreno aeroespacial con otros países que comparten su interés por desarrollarse en este campo, como por ejemplo Brasil, y también con potencias en el sector como Rusia o la Unión Europea, según comunicó el China Daily.

Hace un año, el gobierno chino lanzó un "libro blanco sobre la exploración aeroespacial", en el que confirmaba su intención de desarrollarse en este campo y fijaba objetivos para los próximos 20 años, entre ellos la mencionada exploración lunar.

Según los expertos que trabajan en los proyectos, los objetivos a corto plazo son investigar la actividad solar, los disturbios interplanetarios y los procesos que tienen lugar en las capas exteriores de la Tierra.

"Los hallazgos en el campo aeroespacial serán tan importantes en el Siglo XXI como lo fueron el descubrimiento de la electricidad o el petróleo en el XIX"; declaró el científico Liang Sili.

Sobre el plan de exploración lunar, Sun Laiyan, vice director de la Administración Espacial Nacional China, declinó ofrecer mayores detalles que admitir que era parte del programa para el desarrollo de la industria espacial.

(Fuente: Centro espacial)

NOTICIA 7

La galaxia M82 a vista de telescopio gigante

Eltelescopio japonés Subaru ha obtenido una impresionante imagen de la galaxia M82, una galaxia situada en las inmediaciones de la Vía Láctea, a 12 millones de años luz de nosotros.

Esta imagen de M82 ha sido obtenida a través del telescopio SUBARU, que vio su primera luz en 1999 y durante este tiempo ha estado probando sus siete instrumentos principales, incluyendo FOCAS (Faint Object Camera and Spectrograph) que es con el que se ha obtenido la fotografía.

M82 está catalogada como una galaxia irregular situada a unos 12 millones de años luz. El color azul proviene principalmente de las estrellas de la galaxia. Los filamentos rojos que se extienden perpendicularmente se deben al hidrógeno ionizado, que se observa en la línea de H-alfa, a una longitud de onda de 6563 Angstroms. Estas estructuras se extienden hasta más de diez mil años luz del centro galáctico.

Observaciones adicionales realizadas con el radiotelescopio de 45 metros de Nobeyama, Japón, mostraron que el gas molecular se escapa del núcleo de M82. Se piensa que este flujo de material se debe a la intensa formación de estrellas masivas y sus subsiguientes explosiones de supernova. Este fenómeno recibe el nombre inglés de starburst, y dan lugar a estos supervientos galácticos.

(Fuente: infoastro)

NOTICIA 8

Imágenes de la ocultación de Saturno

El pasado sábado, 3 nov 2001, pudo observarse en Europa y Norte de África una estupenda ocultación de Saturno por la Luna, que sin embargo pasó un tanto desapercibida en los medios de comunicación. La Ocultación

No es habitual que la Luna oculte a un planeta, y menos aún en condiciones de visibilidad como las del pasado sábado. El limbo lunar ocultó a Saturno a las 20:45 TU, y durante una hora fue inobservable. Hacia las 21:45 reapareció (la hora exacta de desaparición y reaparición depende de las coordenadas geográficas).

La imagen

La imagen que vemos pertenece al italiano Lorenzo Comolli. Lorenzo usó un catadióptrico de 20 cm a f/10, con un ocultar Panoptic de 22 mm acoplado a una cámara de vídeo digital Panasonic DS-15.

La fotografía es una composición de dos imágenes para simular cómo se veía en realidad la ocultación. En las exposiciones originales realizadas por Comolli, el brillo lunar saturaba la cámara para capturar a Saturno, por lo que obtuvo otras tomas donde Saturno ya se había ocultado y compuso mediante el ordenador esta imagen final.

(Fuente: infoastro)

Inicio
Boletín Huygens
Nº 34
Artículo anterior
Artículo siguiente